Como siempre y como en todo en Medicina, es preciso valorar las ventajas y contraponerlas a los inconvenientes. No es lícito ni válido someter un enfermo a un riesgo determinado bajo la pretensión de evitar otro riesgo de igual o menor envergadura.

El personal médico de CRIS-UTH visitará previamente a todos los enfermos tributarios de Oxigenoterapia hiperbárica y adoptará las decisiones adecuadas a cada caso. El personal de enfermería, y los operadores de cámara hiperbárica cuidarán de preparar y entrenar a los pacientes para recibir el tratamiento hiperbárico de una forma segura, cómoda, y eficiente.

Un médico o una enfermera acompañará siempre a los pacientes durante su estancia en el interior de la cámara hiperbárica.

CONTRAINDICACIONES

No existen contraindicaciones absolutas para la aplicación de Oxigenoterapia hiperbárica, siempre y cuando la indicación sea sólida y consistente. Sin embargo, en situaciones determinadas hay que adoptar algunas medidas para evitar la aparición de efectos indeseables o secundarios. El personal médico, las enfermeras, los técnicos, y el personal administrativo de CRIS-UTH, adoptarán siempre las precauciones necesarias para evitarlos. Forma parte del entrenamiento del personal sanitario médico y/o de enfermería conocer y dominar con destreza las técnicas necesarias e imprescindibles para hacer frente a todos estos problemas de una forma eficaz, segura, e inocua para los pacientes. Éste es uno de los factores diferenciales de CRIS-UTH.

EFECTOS SECUNDARIOS

Todas las terapéuticas tienen efectos secundarios, y ocultarlos sería falsear la realidad. Es necesario conocerlos para evitarlos y tomas lar medidas adecuadas para prevenirlos.

Toxicidad por Oxígeno. Aunque pueda parecer una afirmación sorprendente, en líneas generales la aparición de efectos tóxicos directos por la oxigenoterapia hiperbárica es sensiblemente inferior a la toxicidad aguda y crónica de la oxigenoterapia normobárica a presión atmosférica mantenida de forma continuada durante procesos prolongados. La explicación es que la hiperbaria desencadena una formación exuberante de antioxidantes fisiológicos que atenúa y neutraliza de forma rápida la formación de Especies reactivas de oxígeno, con lo cual el llamado Estrés oxidativo no se produce o se manifiesta de forma precaria. En la aplicación de oxígeno a presión atmosférica este mecanismo de defensa es mucho menor e insuficiente en muchos casos.

Barotraumatismos ORL. Al aumentar la presión, el aire contenido en el oído medio disminuye de volumen y puede producir dolor en los oídos. El paciente debe pinzarse la nariz con la boca cerrada y forzar como si quisiera soplar. Notará como un silbido y los oídos se destaparán. Este ejercicio se llama Maniobra de Valsalva, o simplemente compensar o ecualizar los oídos. En las cámaras de pequeño tamaño y sobretodo en las monoplaza para una sola persona, es más difícil ecualizar los oídos.

Miopía hiperbárica. En los tratamientos muy largos se puede experimentar un trastorno visual transitorio, como una miopía, que se normaliza al cabo de unos días de finalizar el tratamiento.

Maduración de cataratas preexistentes. La OHB no desencadena cataratas. Pero los pacientes que ya tienen cataratas desarrolladas antes del tratamiento,pueden experimentar una aceleración de su evolución, por lo que deben consultar al médico de CRIS-UTH antes de iniciar el tratamiento.

Crisis hiperóxicas. Cuando el tratamiento precisa ser aplicado a presión muy elevada, se puede desencadenar un brote convulsivo parecido a un ataque epiléptico que cede de forma inmediata y sin secuelas, al retirar la administración de oxígeno. No obstante, estas presiones tan elevadas sólo se plican en el tratamiento de las Intoxicaciones agudas por monóxido de carbono, y en los accidentes disbáricos de buceo. Este tipo de complicación, conocida como Crisis hiperóxica, no puede ocurrir nunca a la presión en que se plica la OHB en las enfermedades crónicas.